Dicen por ahí que, de pequeños, una imagen fija se nos viene a la mente antes de quedarnos dormidos cada noche. Suelen ser recuerdos felices.
Hasta hace relativamente poco, me pasé toda mi infancia empezando mis sueños con una imagen concreta: Una mano de bebé dentro del puño de un hombre adulto.
Con bastante frecuencia me venían destellos, otras veces se quedaba hasta que conseguía dormirme del todo, y otras, simplemente, aparecía mientras pensaba. Me pasé todos esos años intentando adivinar de qué se trataba, y eso que sólo era una niña.
Años más tarde, en mi adolescencia, leí algo sobre el tema de esas imágenes recurrentes, y entonces pensé que podía saber de qué se trataba. Mi deducción fue, ha sido y será esta: Esa imagen era un recuerdo involuntario, y posiblemente, feliz. No era más que mi mano sobre la de mi padre, algo que quizás mis ojos vieron, mi mente capturó y mi recuerdo no alcanzaba. De hecho, quizás debiera asegurar que dibujaba un recuerdo feliz, de los más felices que me quedan, en esos tiempos en los que el mundo apenas dolía. Pero tan sólo debiera, pues, como dicen por ahí, son solo leyendas.
jueves, 29 de marzo de 2012
lunes, 26 de marzo de 2012
Musa.
Quería estar apasionada por algo, y me olvidé que lo estaba. Lo estoy por la música, por aquello que significa y que no significará para mí, y por lo poco que la valoro.
Me basta una canción de Jeff Buckley, Radiohead o Maga, o cualquiera de esas personas que son capaces de decirme tanto entre acorde y acorde, o entre pausa y pausa, para levantarme cada mañana y que escuchar música sea lo primero que haga, antes de respirar, antes de pensar en nada.
Pocas costumbres me quedan, pero he aquí mi favorita: Mente en blanco, música, pienso en las vidas que no tengo ni tendré, en cada posibilidad imposible, en tiempo y miradas de las que se pierden, las oportunidades rechazadas, los recuerdos que no quieren desaparecer y los que yo hago aparecer, en ti, en mí, en él, en ella, en vosotros, en lo mucho que odio esta casa y lo tanto que quiero morir en ella. También en los viajes que no se me permiten y en aquellos que hago con la mente, en la agonía de mi hoy y la rutina de mañana, en el saber y en lo que no soy, en recordar que estoy perdida y no saber dónde encontrarme, en la compañía solitaria o en la soledad acompañada. Quizás lo último debería omitirlo, qué se yo.
Y así pasan los días, entre pausa y pausa, entre acorde y acorde. Con o sin consentimiento, sigo adentrándome en los mundos prohibidos de la belleza, y es por ello que cada día amanece por una razón. Que llueva mañana, que suene siempre.
We never change, do we?
sábado, 24 de marzo de 2012
I’ve had enough of new todays.
Hace unos días, estando con un grupo de personas (llamémoslas "amigos"), intenté decir algo, como de costumbre. No era gran cosa, algún comentario carente de importancia, pues de mi boca poca palabra de valor sale. Fue entonces, cuando una de esas personas dijo entre risas y de un modo jovial y desenfadado: "Déjalo, ¡nadie te escucha!"
Tiene razón, aunque yo añadiría un "nunca" al final de la frase. Y por supuesto, él se refería a ese momento, y yo a cada día de mi vida.
A pesar de las discrepancias he de confesar que soy de ese tipo de personas que hablan mucho y no dicen nada. Quizás por eso el lenguaje verbal me sirva para poco más que decir tonterías y posiblemente esa sea la razón por la que, a día de hoy, no he dicho nada que el resto quiera escuchar. Y lo más triste es que lo que quieren escuchar es algo que jamás pronunciará mi boca. No pondré palabras sinceras en oídos desinteresados.
Mejor dejamos lo importante para nunca, ¿no?
Tiene razón, aunque yo añadiría un "nunca" al final de la frase. Y por supuesto, él se refería a ese momento, y yo a cada día de mi vida.
A pesar de las discrepancias he de confesar que soy de ese tipo de personas que hablan mucho y no dicen nada. Quizás por eso el lenguaje verbal me sirva para poco más que decir tonterías y posiblemente esa sea la razón por la que, a día de hoy, no he dicho nada que el resto quiera escuchar. Y lo más triste es que lo que quieren escuchar es algo que jamás pronunciará mi boca. No pondré palabras sinceras en oídos desinteresados.
Mejor dejamos lo importante para nunca, ¿no?
Love was a joke.
"Don't fool yourself, she was heartache from the moment
that you met her...
And my heart feels so still as I try to find the will
to forget her somehow."
miércoles, 14 de marzo de 2012
Should I lie down or stand up?
"Smells the taste of all we waste, which could feed the others. But we smother each other with the nectar and pucker the sour of sugar sweet. Weather blows through out trees, swims through our seas, flies to the last gasp we left on this earth.
It's a long lonely journey from death to birth..."
- Death to birth (Pagoda)
lunes, 12 de marzo de 2012
lunes, 5 de marzo de 2012
domingo, 4 de marzo de 2012
Inconformismo.
"Cuando se contempla al mundo con un mínimo de perspicacia y se observan las yermas praderas del gozo y el regocijo, los secos riachuelos de la dicha, cuando se observa la estercolera y podredumbre que es la existencia humana en la sociedad en que vivimos, en donde todavía hay cárceles, tortura, hambre, competitividad, rechazo social, estatus y prestigio que aúpa a los unos sobre las costillas de los otros, entonces se comprende perfectamente que una teoría hedónica de la existencia es casi una teoría agónica."
- Manifiesto Hedonista (Esperanza Guisán)
jueves, 1 de marzo de 2012
No me faltes nunca.
La pared de enfrente puede ser tu mejor aliada. Siempre va a hacerte compañía, va a escucharte y jamás te juzgará. Le puedes dar los mejores besos; y la espalda cuantas veces quieras, va a perdonarte.
¿Qué se supone que tengo que envidiar?
¿Qué se supone que tengo que envidiar?
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